martes, 1 de mayo de 2012


CORRUPCION Y MUERTE

El peruano es conocido por su ingenio para salir adelante frente a las carencias, pero  a veces eso no justifica el abandono y las pocas posibilidades de enfrentar al enemigo, como sucede en la lucha planteada por  el estado contra Sendero Luminoso en el Valle del Rio Apurímac – Ene (VRAE).

El golpe de Kiteni con el secuestro de los trabajadores de Camisea y el encuentro de periodistas con subversivos en la zona de conflicto ha hecho mirar nuevamente el equipamiento y la realidad de las fuerzas del orden, pues con los días se ha revelado que los chalecos antibalas no solo los más idóneos para la lucha antiterrorista pues no protegen de los proyectiles de las AKM, además que aun se les da la personal  armas de los años 80 (HK G3) usadas por la extinta Guardia Republicana.

A esto agregamos que por cada operativo a los efectivos se les entrega 3 cacerinas (30 balas), cuando lo óptimo para su buen trabajo es tener 7 cacerinas, también en medio de esta selva no se cuenta con visores nocturnos, radios o binoculares y los detectores de minas a lo máximo ubican los explosivos enterrados a 30 centímetros, de estar más profundas los hombres pagan las consecuencias, por seo luego de la caída del helicóptero aun hay policías y militares que mueren por estas minas o emboscadas, tal como sucedió el viernes 27 donde fallecieron dos policías y 1 militar, además de dos heridos.
AVIONES MIG, COMPRADOS VIA COIMISION  

La renovación del armamento a nivel de los institutos, ha generado siempre controversias pues primeros los chalecos inadecuados, después la compra de fusiles con problemas, pero por opiniones de los comités de adquisiciones se perjudica al estado y a las fuerzas del orden. Algunas perlitas sobre compras fueron los aviones MIG hecho a Bielorrusia (durante los últimos años del gobierno de Fujimori) sin servicio técnico, también la cuestionada compra de los patrulleros durante la segunda gestión de Alan García (con Pilar Mazzeti como Ministra del Interior) e históricamente la muestra de caos  sobre armas sucedió en la guerra con Chile, donde teníamos tres tipos de fusiles cada uno con diferentes calibres.

Otro de los escándalos que remeció a nuestra vapuleada fuerzas armadas, los ranchos alimenticios que se estaban dando a los efectivos, fueron cuestionados por el mal estado pudiendo provocar problemas de salud y el responsable de esto es la misma persona que durante el 2007 fue acusado de sobrevalorar el precio de los alimentos distribuidos a los damnificados del terremoto en Ica. Un ex jefe militar expresó que en medio de esta crisis en el VRAE se hable de tantos cuestionamientos, como tratando de justificar estos problemas.
Hasta el Cardenal Juan Luis  Cirpiani ha dado su opinión diciendo: “no hay que mandar patrullas si antes no se tiene un informe de inteligencia”, al respecto, oficiales de alta graduación opinan que se debe dejar a las fuerzas del orden hacer su trabajo. Pero las carencias no solo es de logística (armas, chalecos, etc.) al parecer los egoísmos en la cooperación también siguen pues todo indica que el Ejército no colabora a plenitud con la Policía Nacional para enfrentar a Sendero.
POLICIAS EXPONEN SU VIDA CADA DIA EN  EL VRAE

Para derrotar a los llamados por el gobierno “remanentes senderistas” se debe en primer lugar dotar con lo último de la tecnología a la fuerzas del orden, buenas armas, automóviles ideales, vigilancia satelital, radiocomunicaciones, buenos ranchos alimenticios. Algunos opinan que se debe crear un comando único para que se encargue de las comparas, buscando proveedores en el mercado internacional, aunque se intenta palear este problema con la aprobación de un fondo fe mil 375 millones de soles, para mejorar el equipamiento. Unión y coordinación es lo que  se necesita para solucionar este grave problema que afecta al Perú.

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